Por Régulo José Santos
Trujillo
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M
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ichelangelo da
Vinci artista plástico trujillano aduce que ante las numerosas
dificultades evidenciadas al entorno citadino debemos tener suficiente valor
y coraje para afrontar los retos del mañana ubicando cada elemento en su sitio
de labores sin cometer acciones vandálicas fuera del margen racional.
Además indica que andar
de buen humor resulta plácido para la salud, la tensión, el metabolismo alimenticio
desarrollo muscular, entre otros.
" El rostro humano
interpreta el carácter cuando se estima que de forma espontánea tendremos un
encuentro sorprendente de emociones, hay que controlar el patrón de conducta
adquirido para no entrever de fantoche"
TOQUE MÁGICO
Añade que el toque mágico se complementa
en el principio lógico que incide la personalidad fuera de prejuicios, apunta
que la lisonja se implementa en una estrategia para entrar en confianza con lo
adverso.
Aclara que la idea no es ganar
indulgencia con indumentaria ajena, pues nadie está expuesto a tolerar la
sandez banal de quienes desvaloran y subestiman la condición y el talento
humano.
PRECISAR EL ÁNGULO
Ensanchar sin ponderación el
ventanal que destella la virtud contemplando con certeza el panorama novedoso,
todo depende desde el ángulo de medida, altura, longitud, distancia, punto
lineal y precisión detallando cual sea su criterio, visión, objetividad y
anomalía, en ocasiones pensar de manera tajante – agrega da Vinci - no es
recomendable menos lo pragmático.
Señala que harto sabrá
lo que se tenga en el saber común de quienes vituperan a sabiendas cual nadie
sabe sin ocultar la sapiencia.
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