PARANINFO

Es que no es cualquier enfermo

Iván Olaizola D’Alessandro

Por favor, si pasa algo que no se lo lleven a Jerusalén. 

En paraninfo anterior hacía una parodia con la enfermedad del presiente, del condominio decía en la columna, pero pasado los días la cosa se ha puesto seria. El presidente del condominio donde habito se repuso, pero no así el presidente del otro condominio donde también habito. Y no es que uno se preocupe más o menos por la salud de alguien, sea o no familiar, amigo, o conocido. En este caso el enfermo claro que es un conocido de uno, y vaya que bien conocido. Desde el 4F, lo empezamos a conocer. En pocos segundos se nos presentó. A partir de allí llevamos 20 años conociéndolo y 12 padeciéndolo. Por eso no se puede criticar que estemos pendientes y hasta preocupados por la enfermedad de este paciente.
Se supone que todo ser vivo se puede enfermar. Los seres humanos, que son los seres vivos más vivos, también se enferman. Por lo tanto no es nada raro que alguien se enferme. Es un proceso natural, se nace, se crece y se muere. Así de simple. Y cuando el enfermo es alguien que tiene alta responsabilidad es normal que aquellos que de alguna manera dependen de él estén pendientes de lo que tiene, cual es la gravedad de la dolencia, qué le han hecho, cuánto durará la convalecencia. Y este es el caso que nos ocupa en esta tierra de Bolívar.
Se enfermó el presidente de la República. Dada su inmensa responsabilidad como primer magistrado nacional es lógico que todo el país esté pendiente de su salud. No es que haya unos que lo quieran ver sano y otros que lo quieran ver muerto, no, es que tenemos todo el derecho de estar bien informados sobre el particular. En cualquier país con un gobierno democrático, la salud del jefe del Estado es cosa pública. Así que aquí ha debido de informarse oportuna y verazmente todo lo concerniente a lo que le pasaba al teniente coronel. Y si su estado de salud era tal que lo imposibilitaba de estar al frente de su cargo, pues la constitución tiene el mecanismo para solventar esto. Se encarga de esas labores el vicepresidente. No es que se quiera que él deje el cargo o que se quiera más al vice Jaua. No. Simplemente que por respeto a las disposiciones constitucionales ha debido procederse así. Y se hubiese evitado tanto alboroto. De todas maneras todos sabemos que aun siendo el vice Jaua o cualquier otro vice, el encargado del coroto, que hay bastantes, el jefe es el comandante en jefe. Y por más videos se le ve el bojote. Ya no hay cumbre de jefes de Estado para crear la Comunidad Latinoamericana y del Caribe, y lo más probable es que haya el desfile bicentenario sin el teniente coronel disfrazado de militar activo. Total una vez repuesto y dado de alta cubana asume su cargo. Jaua no es Gómez, él no es Castro ni estamos a comienzos del Siglo XX. No sé, digo yo. 
 
iolaizola@hotmail.com

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