¿Tribunales de justicia o de injusticia?

José Camejo Suárez *
Usualmente se define el término injusticia como la falta de justicia. Al mismo tiempo se reconoce con certidumbre que la verdadera justicia procura el bien común y la equidad dentro de múltiples entes sociales que pueden partir desde lo general hasta lo individual. Por tanto, la injusticia implica substancialmente la falta de respeto y consideración por los derechos, tanto de los personas como de la comunidad, y esta falta de respeto o esta carencia de derechos puede notarse de diversas formas; algunas muy diminutas y casi imperceptibles, otras más evidentes y flagrantes. Si se concibe que la justicia es la búsqueda del bien común y de la convivencia humana, entonces, se puede inferir que la injusticia es el beneficio de unos en detrimento de otros.
¿Por qué estas definiciones? Pues resulta que en Venezuela, al parecer, los tribunales de justicia se empeñan en ser tribunales de injusticia, su actuación es deprimente, incluso como ejemplo se puede tomar la pérdida de tiempo que suelen practicar sin el más mínimo recato, el día viernes 9 de abril de 2010, en los tribunales civiles ubicados en la Torre Norte del Silencio, en Caracas, no hubo despacho, en las puertas, completamente cerradas se podía leer el siguiente texto: “SE PARTICIPA A TODOS LOS ABOGADOS LITIGANTES Y PÚBLICO EN GENERAL QUE CONFORME A RESOLUCIÓN Nº 2010-01 SE ACORDO NO DAR DESPACHO EL DÍA VIERNES 09 DE ABRIL DE 2010, EN VIRTUD DE QUE TODOS LOS FUNCIONARIOS ASISTIRAN A LOS CURSOS DE INDUCCIÓN Y REFORZAMIENTO IMPARTIDOS POR LA ESCUELA NACIONAL DE LA MAGISTRATURA. (Sic.) EL JUEZ COORDINADOR.
Por una parte se aplaude y se celebra que los funcionarios reciban cursos de inducción, la práctica judicial así lo demanda con urgencia, lo que se torna intolerable es que precisamente dispongan del poco tiempo útil destinado a las actividades del Despacho para ello, pues si actualmente sólo laboran medio día, es conveniente preguntar ¿Por qué el otro medio día no se lo dedican a la inducción que imparte la Escuela Nacional de la Magistratura? ¿Quién le responde al abogado litigante y al público en general? Por el tiempo perdido ¿El Juez Coordinador? No lo sabemos. O es que a estos funcionarios les pagan la mitad de su sueldo, por aquello que, en justicia pertence, igual trabajo igual remuneración.
De todos modos, a quien le corresponda es oportuno hacerle saber que en el caso del ciudadano, la injusticia surge a partir de la corrupción de los valores de verdad y certeza, respeto, solidaridad, amor por el prójimo y ética. Por tanto cuando alguno de estos valores no se toma en cuenta y es dejado de lado en los comportamientos de todos los días, los eventos de injusticia se marcan visiblemente.
Y estos actos de injustica, a nuestro juicio, se originan precisamente cuando en el pueblo de Venezuela, la acumulación desmedida de expedientes en los tribunales, requiere de respuestas contundentes, resultados tangibles, decisiones oportunas, eficacia y eficiencia; mientras esto no acurra, permanecerá abierta la compuerta que da paso libre a la impunidad, la desilusión y al desequilibrio social. Puesto que al pensar en injusticia o en la carencia de justicia, raudamente nos inclinamos a coligarla con el ámbito de la bizarría judicial o legal. En las cuales, la injusticia se confirma al no condenar acertadamente a un fuera de ley o al no actuar acorde con lo que instaura la ley.
La faena que procura la reducción de los comportamientos inicuos fortuitos o totales es señal en la que todo el conglomerado social debe envolverse. La injusticia concurre, salvo mejor opinión, cuando los integrantes de una sociedad o comunidad ignoran los derechos de los demás y pasan por encima de ellos. Vale sostener que el canje de actitud ante pequeñas o grandes situaciones de injusticia es el único camino hacia el logro de sólidas estructuras que administran justicia.

*Magíster en Docencia Universitaria
*Director Ejecutivo del IUPMA
Email: camejosuarez@hotmail.com
Publicado en el diario digital APORREA el 10-04-2010. Sección:Por los derechos humanos contra la impunidad.

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